Oyes un rugido aterrador y decides volver al campamento. Para tu sorpresa, cuando estás a unos metros de distancia de tu destino, observas cómo un oso enorme destroza tu tienda de campaña. La adrenalina se te dispara, pero gracias a Ursa, no entras en pánico y controlas cada situación de peligro que se te presenta en el camino.